¿Alguna vez escuchaste la expresión experiencia gastronómica? ¿Alguna vez pensaste en cuántas veces has ido a comer a un restaurante? Lo más probable es que lo hayas hecho cientos de veces. Quizá recuerdes dos o tres lugares, cuatro o cinco platillos.
Pero lo que sigues recordando no solo es la comida, también los olores, la música, el ambiente, y por supuesto el trato. Todos estos elementos conforman lo que se llama experiencia gastronómica, involucrando los cinco sentidos.
Porque no fue solo una comida rica la que satisfizo tu gusto. También fue aquello que te llenó la vista, el oído, el tacto, el olfato. Eso que casi sin que lo percibieras entró a tu memoria afectiva y generó emociones y sensaciones difíciles de olvidar.
En la actualidad, esa experiencia integral es lo que buscan los comensales y, por lo tanto, lo que deberías pensar si tienes un negocio relacionado con la hostelería. Si quieres saber qué es una experiencia gastronómica y la manera de crearla para atraer clientes, no te puedes perder este artículo.
La experiencia gastronómica es el conjunto de vivencias y sensaciones que la gente tiene en un restaurante. Comprende la comida, la atención, el concepto, el local, iluminación, decoración, música… Todos los elementos tanto físicos como sensoriales que sirven para atraer clientes.
Ahora la gente no solo quiere comer un buen platillo. Quiere tener una vivencia única que lo enamore. Busca algo que lo haga volver, llevar a su familia y amistades a ese lugar especial y único. Para lograrlo, hay que ofrecer al comensal un servicio integral. Para ello es necesario contar con:
Es fundamental contar con un equipo de trabajo amable, comprometido y profesional que cree el mejor ambiente. El personal debe conocer al dedillo la propuesta gastronómica, la carta de bebidas, postres, especiales, así como las características del restaurante.
Pero también tienes que encontrar aquello que te distingue de la competencia. Al hacer marketing experiencial, privilegias la originalidad y creatividad y las integras a tu propuesta. Se trata de que tu restaurante sea especial, inigualable, a partir de un menú original y creativo.
Para lograr imponer tu sello personal, los espacios, la decoración, los alimentos, la iluminación y la música deben corresponder al concepto de tu marca. Ten en mente la manera en que quieres que los comensales recuerden tu restaurante. El objetivo es ofrecer una experiencia gastronómica y que ésta sea como un viaje que comienza al entrar a tu negocio.
Para lograrlo, puedes recurrir al Storytelling de hostelería: haz que tu negocio cuente una historia y que tu cliente sea parte de ella. Esto se logra mediante el diseño de menús y la descripción de platillos. Además, con el mobiliario, los platos, cubiertos, mantelería, la página de internet, las redes sociodigitales y, claro, la comida.
Es muy importante que conozcas bien a tu público, para lo cual son necesarios los estudios de mercado y el marketing para restaurantes. Al conocer sus necesidades, podrás satisfacerlas con destreza. Saber qué tipo de ambientes prefieren, la ubicación idónea de los locales para un acceso fácil y seguro, etc.
Cuando logres fusionar todo esto: platillos, ambiente, concepto, infraestructura, diseño, iluminación y atención, estarás creando una experiencia gastronómica y recuerdos imborrables. Generarás emociones que harán que tus comensales recomienden tu marca, hagan promoción voz a voz y regresen a tu restaurante una y otra vez.
