El marketing nutricional es una nueva técnica publicitaria para la venta de alimentos. Claro, todos sabemos que ya existe el marketing alimentario. Entonces, ¿cuál es la diferencia entre uno y otro?
El marketing tradicional de la industria alimentaria basa sus estrategias de venta en la apariencia del producto, eslóganes y envoltorios llamativos. Por otro lado el marketing nutricional, como su nombre lo indica, tiene como tarea primordial promover el valor nutricional del producto. Esta nueva forma de abordar el tema de la alimentación es, a simple vista, más saludable. Veamos a continuación qué otras características suyas han contribuido a su gran auge en la actualidad.
Uno de los aspectos más valiosos de esta estrategia de marketing es su base científica. No en vano su popularidad va en aumento.
El marketing nutricional se da la tarea de estar presente desde el primer momento de la creación del producto. De esta manera, se empapa detalladamente del valor saludable de este.
Una vez comienza a circular dicho alimento, se ve respaldado por una campaña publicitaria basada en datos netamente científicos y comprobables. Esto aumenta notablemente la credibilidad de la marca lo que se traduce en fidelidad de público y venta, ya que los resultados que se prometan en la campaña serán garantizados.
La población que se preocupa por mantener una dieta saludable es cada vez mayor. En la actualidad, las personas están más interesadas en qué beneficios reales conlleva consumir un alimento y menos en quién suele consumirlo con regularidad. Eso repercute en las necesidades del público objetivo de las empresas.
Las empresas encargadas de la fabricación y distribución de comestibles están al tanto de esta situación y, en consecuencia, están renovando sus productos.
En grandes términos, los resultados son favorables a ambas partes: la empresa logra éxito y aumento de ventas; el cliente logra vivir saludablemente.
Teniendo en cuenta las características ya expuestas del marketing nutricional, no es difícil intuir que la comunicación con el público es mucho más transparente, puesto que no se basa en falsas expectativas.
Otro detalle a resaltar sobre este tipo de marketing alimentario es que toman en cuenta las sugerencias de su público para mejorar el producto.
Todos los aspectos del marketing nutricional apuntan a un modo de vida natural y saludable. En pos de no solamente la salud individual, sino también la colectiva.
Por lo tanto, los envoltorios que usan las empresas que abogan por este marketing son eco-friendly. Es decir, están pensados de manera que no dañen el ecosistema.
Para esto usan materiales reciclados y biodegradables. El aspecto no es más una prioridad, la vida sí.
El futuro de la alimentación está en el marketing nutricional. Las empresas que adopten este enfoque estarán mejor posicionadas para tener éxito en un mercado cada vez más consciente de la importancia de la salud y el bienestar.
El marketing nutricional, como seguramente ya descubriste, no tiene por objetivo principal vender. Más bien esto es una consecuencia directa de su impacto en el público. Teniendo esto en cuenta, tratemos ahora la parte educativa de este asunto.
Existe un segmento de esta publicidad dedicada a la divulgación de los beneficios que tiene atenerse a una dieta rica en nutrientes. Eso es contenido de valor, con las estrategias adecuadas, el marketing nutricional puede posicionar tu marca con mucha facilidad.
Igualmente te serán más accesibles sectores de la población con una dieta limitada por frágiles condiciones de salud. Visto de esta manera, el marketing nutricional tendría un alcance más amplio que el marketing tradicional de alimentos.
Si has leído este artículo seguramente coincidirás en que si del marketing nutricional se trata, todas son ventajas. La combinación de estrategias de venta digitales y un producto de valor es la nueva fórmula de éxito que propone esta innovadora forma de marketing en la industria alimentaria.
Ahora vamos a mostrarte algunas acciones de marketing que puedes implementar para una campaña de marketing nutricional. Como decíamos antes, esto debería estar presente desde el nacimiento del producto, ya que se funde con sus valores y beneficios.
Una acción fundamental es proveer un etiquetado claro y comprensible que destaque los beneficios nutricionales del producto. Esto incluye información sobre calorías, grasas, azúcares, proteínas, vitaminas y minerales, así como cualquier beneficio saludable verificado, como "alto en fibra" o "fuente de omega-3".
Desarrollar campañas que informen a los consumidores sobre cómo ciertos nutrientes contribuyen a su salud. Por ejemplo, una campaña podría explicar los beneficios del omega-3 para la salud cardiovascular, y cómo los productos de la marca contribuyen a una dieta rica en este nutriente.
Publicar recetas y contenido en blogs, redes sociales o newsletters que incorporen los productos de la marca de manera que promuevan un estilo de vida saludable. Esto no solo muestra la versatilidad del producto, sino que también educa al consumidor sobre cómo incorporar alimentos nutritivos en su dieta diaria.
Colaborar con nutricionistas, dietistas y otros profesionales de la salud para crear contenido educativo, webinars o talleres. Estos expertos pueden avalar los beneficios nutricionales de los productos, añadiendo una capa adicional de credibilidad a las campañas de marketing.
Estas acciones, ejecutadas correctamente, no solo promueven los productos de manera efectiva sino que también contribuyen al bienestar general de los consumidores, alentándolos a tomar decisiones más informadas sobre su alimentación.
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